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martes, 13 de enero de 2009

La mañana


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Caen lágrimas que se pierden en el vacío. Llora el alma desconsolada. Un abrazo a tiempo, una caricia en medio de la noche. El reloj marca con puntería las 4:00 de la madrugada.

There's so much life here
and so much pain - we forget
there's so much life
as morning comes
and its real - the silence

Hay mucho dolor aquí. Duele el pecho, tiembla el cuerpo. Un frío recorre el corazón. Un único pensamiento de muerte. Poner fin.

Hay tanta vida cuando llega la mañana...

1 comentario:

  1. Érase una vez en un tiempo muy lejano, en un lugar desconocido que una chica lloraba bajo la luna en un bosque desierto. Sus lágrimas enfilaban el camino de sus mejillas hasta volar lentamente cayendo hacia el suelo. Su desconsuelo era tal que los animalitos del bosque a su alrededor se posicionaban, observando con curiosidad y tristeza. En eso que un viajero, un hombre anciano, viajando cruzaba el bosque. Tal fue su sorpresa al ver a la chica llorar, que su caminar detuvo y de mirarla no pudo parar. Al percatarse de no estar sola la chica lo miró. "No temas chiquilla, nada voy a hacerte" "¿Puedo saber el motivo de tu tristeza?" Ella meditando se quedó y tras un rato le contestó. "No hay un motivo concreto, la tristeza me asaltó y en mi se instaló y llorando, llorando, conmigo está bailando".
    El viajero un suspiró realizó y reanudando la marcha a la noche susurró "chiquilla llorar no es malo. Hoy la tristeza te ha invadido, pero pronto marchará. Veo un gran futuro para ti. Más adelante la tristeza volverá y tratará de captarte de nuevo...pero los abrazos y cariños de alguien junto con tu valia harán a la tristeza darse cuenta de que no hay lugar en ti...y huirá en busca de otra presa" Ya se alejaba el anciano viajero cuando lanzó un último aliento al viento "¿recuerda? nada es eterno, tampoco la tristeza" Y caminando entre las sombras desapareció. Poco a poco la chiquilla dejó de llorar. Se levantó y mientras las lágrimas se derramaban por sus mejillas susurró..."nada dura eternamente, tampoco la tristeza" Pese a sus lágrimas, una sonrisa en su rostro se esbozó y caminando, caminando entre las sombras desapareció.

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