Caigo vertiginosamente, me precipito hacia la acera. El final es eminente y los segundos pasan lentos. El viento deforma mi cuerpo, la fuerza de la gravedad me atrae con una fuerza inusitada. Miro hacia arriba, mis hermanas también caen, con sus cuerpos panzudos, detrás de mí. El sol se ha ocultado definitivamente detrás de las densas nubes. Vuelvo a mirar el suelo, la caída parece una eternidad. Me imagino impactando en aquel charco grande, mi cuerpo se desvanecerá en el agua. ¿Quién me recordará?
¿Quién recordará esta gota que esta tarde cayó en Santa Coloma? ¿Quién recordará sus gotas hermanas que cayeron con ella? ¿En cuál de todos los charcos quedarán sus esencias?
¿Quién recordará esta gota que esta tarde cayó en Santa Coloma? ¿Quién recordará sus gotas hermanas que cayeron con ella? ¿En cuál de todos los charcos quedarán sus esencias?
"Definitivamente el sol se ocultó ayer y no sabemos cuando va a volver a aparecer". La presentadora de las noticias lo decia con una enorme sonrisa en sus cara. Nunca he llegado a comprender como pueden plantarse delante de las cámaras y trasmitir las más horribles miserias humanas y permanecer imposibles, impávidos, como muñecos de cera articulados controlados por algún macabro titiritero que disfruta controlando nuestras emociones.
ResponderEliminarEra extraño. "Definitivamente el sol se ocultó ayer y no sabemos cuando va a volver a aparecer". Lo dijo como si simplemtente fuera a llover como hacia 300 años. Las cosas habian cambiado mucho desde entonces y ahora una noticia como esa significaba un cambio en todo nuestro universo. El sol...el sol se habia ido. La última vez que eso pasó, el caos reinó, y todo cambió.
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Esta mañana no he visto el sol por mi ventana. Me he levantado, he mirado y nada. No estaba. No he bostezado, no he llorado, no he sonreido. Ni siquiera sabia porque me había levantado puesto que una de las últimas cosas me hacían felices simplemente ya no estaba. No deberia estar sorprendido. Generalmente estás cosas pasan cada seis meses. Ese ha sido el problema. Me he confiado. Estúpido de mí pensé que está vez sería diferente. Estúpido. La leccíon ya debería estar aprendida por mi parte. Desde hace siglos mi felicidad dura seis meses. Seis putos meses. Es poco tiempo...demasiado poco tiempo. Joder,ni siquiera hablo de la felicidad completa. Hablo de porciones de felicidad... y no me iba mal. Pero está vez estaba convencido de que seria diferente. Siempre lo pienso. Siempre me equivoco. Estúpido. Diez meses, esta vez ha durado diez meses. Y de que me ha servido...vuelvo al punto de partida donde tantas veces he estado. Reestructar mi vida, mis valores, mis objetivos, mis anhelos, mis deseos...joder, otra vez no. Estoy cansado. Demasiado cansado. Volver una y otra vez a un punto que intento desesperadamente alejar de mi tanto como puedo pero que no consigo.
Quiza esa es mi vida. Pequeñas porciones de felicidad acompañadas de grandes pedazos de sufrimiento.
Por ello me he quedado todo el día sentado en la cocina sin hacer nada.
No he comido, no he bebido, no he llorado, no he sonreido. Simplemente ha estado. Un día vacio como los de antes.
"Definitivamente el sol se ocultó ayer..." Se ocultó y todo cambió de nuevo. Cambios...cambios...cambios. Sentado en la cocina veo como el mundo cambia a mi alrededor a excepción de mi. Pero..no puede ser...no puedo creer lo que ven mis ojos. Frente a mi un frutero, lleno de fruta fresca. Me froto los ojos. Es increible lo que ven. Un manzana en la lejania...esta´...llorando. No puede ser. Parpadeo. Agudizo mi vista. Vaya, es cierto. Está llorando. Una diminuta lágrima le resbala por su "mejilla". Genial está fruta me va a hacer rico.
Una manzana llorando. La gente pagará millondas por presenciarlo.
Una manzana que llora.
Increible.
Una lágrima dimiuta la recorre de arriba a abajo.
Una manzana que llora.
Una manzana que...llora
Una manzana que...¿llora?
Las manzanas no lloran. Me cago en mi suerte, el sol desaparece y yo tengo bichos en mi cocina.
Marco.
R.