Nube de etiquetas

jueves, 31 de diciembre de 2009

Cuento baladín-bom-bam

Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis... ¡¡y siete!!
-Bien.- dijo el profesor con resuelto aire de satisfacción -Veo que las clases sirvieron para algo...
Pero maestro, sensei, ¡oh, sabio de entre los sabios! ¿Para qué necesito saber todo esto si mi función en la vida es cargar cáscaras de pipas cuando estoy ahí arriba, y cavar hondo cuando estoy aquí abajo?
-Aun tengo que pensar para qué necesitas esto... pero nunca se sabe, hijo mío... nunca se sabe...- respondió el profesor no sin cierto aire de misterio. Y acto seguido, dio media vuelta y desapareció tras la despensa.
El hormigón se fue cabizbajo pensando en todo aquello. No le veía ningún sentido pero desde pequeño le habían enseñado a cumplir órdenes. Al cabo de unos minutos, ya volvía a repasar mentalmente sus lecciones:
Uno, dos, tres... cuatro, cinco, seis... siete...

(...)
FIN

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué te ha parecido? Déjame tu comentario: